Lección 05 | 07 30 2022 |
“...En el mundo tendréis aflicción, pero confiad.
Yo he vencido al mundo.” Juan 16:33
Lectura Bíblica: Génesis 29:15-30, 37:11,28,36, 39:19-20, 40:14-15,23
Propósito: Comprender que tenemos que seguir adelante a pesar de la falta de apoyo del conyugue u otro familiar. Teniendo la confianza en Dios ya que él no nos desampara.
Introducción: Uno de los problemas que encontramos en la vida es; la falta de apoyo ya sea de algún familiar o conyugue. La envidia, la falta de amor o la falta de recursos económicos son factores que influyen a la hora de necesitar apoyo. Si analizamos las siguientes preguntas: ¿Alguna vez ha necesitado apoyo y no se lo han dado? ¿La han abandonado sus seres queridos cuando más los ha necesitado? ¿Le ha pasado esto alguna vez; o siempre le han ayudado cuando ha pedido apoyo? podremos responder que: En muchas ocasiones no sucede como uno espera o como nos lo han prometido, y nos pasa como le pasó a Jacob según Génesis 29:25-27. Labán y Jacob hicieron un acuerdo: Labán le iba dar a Raquel (su hija menor) si Jacob trabajaba durante 7 años para El. Pero cuando se cumplió el tiempo, (verso 23) sucedió que a la noche tomó a Lea su hija y se la trajo. (verso 25) Venida la mañana, he aquí que era Lea (la hija mayor). Entonces Jacob dijo a Labán: ¿Qué es esto que me has hecho? ¿No te he servido por Raquel? ¿Por qué, pues, me has engañado? Y Labán respondió: No se hace así en nuestro lugar, que se dé la menor antes de la mayor, cumple la semana de esta y se te dará también la otra, por el servicio que hagas conmigo otros 7 años.
Tenemos también el ejemplo de José. Quien pasó por dificultades en las que no tuvo el apoyo de sus hermanos, Él estaba solo. Vamos a ver lo que les sucedió: 1. Fue vendido por sus propios hermanos, porque le tenían envidia (Génesis 37:11,28,36). Muchas veces confiamos que nuestros hermanos(as) nos van a apoyar cuando los necesitemos, pero vemos que para José no fue así, sino que sus propios hermanos le hicieron daño. 2. Fue acusado falsamente por la mujer de Potifar; argumentan- do que José quería deshonrarla. 3. Fue Encarcelado por esa mentira de la mujer de Potifar. (Génesis 39:19,20). 4. Fue Olvidado por el copero del rey: A quien José pidió ayuda estando en la cárcel, le dijo que cuando estuviera afuera (el copero) se acordara e intercediera por El ante Faraón, pero éste se olvidó de José. (Génesis 40:14-15,23).
Estos dos personajes, tuvieron que pasar por situaciones donde necesitaron apoyo y no lo recibieron, sino que las personas se aprovecharon de su situación, ya que estaban solos y en tierra extranjera. Jacob trabajó dos veces por la misma causa porque fue engañado, y se aprovecharon de la situación. Y José a pesar haber sido vendido, calumniado, encarcelado y olvidado por el copero del rey en la cárcel; Él sabía que, aunque estaba solo y no tenía el apoyo de algún ser humano, si contaba con el apoyo de Dios, lo cual notó también el Faraón, según Génesis 41:38-39 “Y dijo Faraón a sus siervos: ¿Acaso hallaremos a otro hombre como este, en quien esté el espíritu de Dios? pues que Dios te ha hecho saber todo esto, no hay entendido ni sabio como tú.”
En lo material vamos a pasar por situaciones similares y en lo espiritual también puede suceder cuando uno desea buscar a Dios; la pareja, los padres, los hijos, los hermanos, o cualquier miembro de la familia, no nos apoyan, y nos abandonan en nuestra decisión. Y los amigos se alejan porque no comparten el mismo credo, y nos damos cuenta de que estamos solas (huma- namente hablando) nos dejan de hablar o hasta se burlan de nosotras, definitivamente no sentimos el apoyo que quisiéramos. El punto importante es temer a Dios y buscar su apoyo, hay un dicho común entre nosotras: “El que quiera celeste que le cueste.” Como cristianas debemos tener presente que nada llegará a nuestra vida facilmente, pero estando en Cristo Jesús todo es posible. ¿Qué debemos hacer? poner atención a los consejos de: Salmo 118:8 que dice: “Mejor es confiar en Jehová que confiar en el hombre.” Como tambien: Isaías 41:10, “No temas porque yo estoy contigo; no desmayes porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”
Conclusión: Así que hermanas, si no tenemos el apoyo de ningún ser humano cuando lo necesitemos, ya sea en lo material o espiritual; tenemos que recordar que con la ayuda de Dios todo lo podemos, esforcémonos y seamos valientes. Recordemos lo dicho en Filipenses 4:13,“Todo lo puedo en Cristo que me forta- lece.” Paz a vosotras.
Hermanos aqui les adjuntamos en documento PDF. la escuela que estamos estudiando este tercer trimestre del año 2022. Pueden descargarlo, y compartirlo con los hermanos que lo necesiten.
Comments